Yo no quería brillar como las estrellas, pero si quería aunque fuese una lámpara que me iluminase el camino.
viernes, 24 de febrero de 2017
viernes, 17 de febrero de 2017
Perdonadme, mi amor
Había abandonado los libros, los escritos, me había entregado rotundamente a la música y a la zozobra.
Mis tardes eran peor que otras y le escribía cada vez que ya no podía sostener tanta resistencia entre mi boca.
Me había entregado a ella en éstas cuatro paredes en la que me la imaginaba junto a mi lado.
Contenía sollozos mis actos, mis labios, mis ojos porque aunque decía que no estaba lista, tenía otro amor que posiblemente haría pedazos. Pero, aunque la nostalgia aún inunda mi vida, mi amor, perdonadme, te he soltado... porque así lo quisiste. Preferiste ser un colibrí y yo un maldito soldado.
Mis tardes eran peor que otras y le escribía cada vez que ya no podía sostener tanta resistencia entre mi boca.
Me había entregado a ella en éstas cuatro paredes en la que me la imaginaba junto a mi lado.
Contenía sollozos mis actos, mis labios, mis ojos porque aunque decía que no estaba lista, tenía otro amor que posiblemente haría pedazos. Pero, aunque la nostalgia aún inunda mi vida, mi amor, perdonadme, te he soltado... porque así lo quisiste. Preferiste ser un colibrí y yo un maldito soldado.
sábado, 11 de febrero de 2017
He arropado el silencio entre nuestros cuerpos y, las madrugadas se han vuelto más eternas y el sueño bastante pasajero.
Las tardes las cubre un estruendoso frío y un melancólico intento por cerrar puertas que abríamos abierto para su determinado momento. Perdonadme, amor mío, pero siempre, siempre, necesitaré mis cuatro esquinas para recorrer los memorándum en el que mi tiempo se habría vuelto maravillosamente eterno
Las tardes las cubre un estruendoso frío y un melancólico intento por cerrar puertas que abríamos abierto para su determinado momento. Perdonadme, amor mío, pero siempre, siempre, necesitaré mis cuatro esquinas para recorrer los memorándum en el que mi tiempo se habría vuelto maravillosamente eterno
jueves, 9 de febrero de 2017
sábado, 4 de febrero de 2017
Ya han pasado algunos meses desde que se ha oscurecido mi cielo, se ha vuelto una torrente secuencial que me impide dejar de buscarla en un par de letras.
Los caminos se han vuelto menos ligeros y camino por las calles más vacías para poder socializar de nuevo con mis recuerdos. He tratado de mantenerme en un equilibrio impetuoso pero parece un precipicio sin regreso, es que ha cerrado puertas y ventanas dejándome sin aire, dejándome morir allí adentro.
Los caminos se han vuelto menos ligeros y camino por las calles más vacías para poder socializar de nuevo con mis recuerdos. He tratado de mantenerme en un equilibrio impetuoso pero parece un precipicio sin regreso, es que ha cerrado puertas y ventanas dejándome sin aire, dejándome morir allí adentro.
viernes, 3 de febrero de 2017
Hace ya tiempo las palabras se las llevó el viento, el amor lo convirtió en cenizas el tiempo y lo muerto, realmente, no está muerto.
Me he estado mintiendo, he gritado a los cuatro vientos ese insaciable argumento para dejarte ir y no hacer más intentos. Lo intento.
Pero todo se resume a un salvavidas porque he terminado por estar corriendo. Siento miedo, he prometido no hablar al respecto pero, siento miedo.
Me he estado mintiendo, he gritado a los cuatro vientos ese insaciable argumento para dejarte ir y no hacer más intentos. Lo intento.
Pero todo se resume a un salvavidas porque he terminado por estar corriendo. Siento miedo, he prometido no hablar al respecto pero, siento miedo.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)